Casa La Reina
Planteada para gozar el jardín, la casa se ubica entre rocas y dos jacarandás preexistentes, escalonada en tres lugares para acompañar la leve pendiente del sitio. La fachada frontal es de hormigón y algo hermética para que la amplitud del jardín posterior sea una sorpresa.
La sala de estar es en realidad una cocina grande, donde todo sucede. El ambiente se amplía hacia la galería, suavemente sombreada por parras, bajo la cual se puede comer y trabajar casi todo el año.
El único elemento que rompe con la porfiada linealidad de la casa es una ventana que apunta al cielo y por la que desfilan las nubes, los pájaros, la luna. Diez años después agregamos una habitación-círculo forrada en roble del sur, con acceso independiente.
La primera etapa la diseñamos en conjunto con el arquitecto J.F Garcés.